Detecta la cantidad de carga y su distribución sobre cada eje, y ajusta automáticamente los parámetros del Control Electrónico de Estabilidad para mejorar el comportamiento del vehículo.
El sistema modifica las propiedades dinámicas del vehículo, la reacción, la respuesta ante aceleraciones y frenadas, y el comportamiento en curvas compensando el peso y la posición de la carga que transporte.